Interesante artículo sobre un tema absolutamente crucial. La sed, y otro que subyace tras él. La tiranía de quien domina la cesta.
Tratamos constantemente de seleccionar animales especiales, fuertes, vigorosos, con un sentido de la orientación por encima de la media, con una resistencia keniata, con un gran aguante ante la presión rapaz; en otros casos además, animales capaces de volar a ciegas sobre el óceano, pero todo ello carece de valor si no nacieron con el don innato y especial de "saber estar".
No educo a mis palomas a beber en al cesta, a pesar de que en una sola temporada han llegado a vivir en ella 28 noches, pero hay un factor que sí selecciona la cesta: El saber vivir en ella.
Todo se entrena, pero hay animales que una vez dentro, se hacen con aquella esquina, u otras que dominan autoritariamente el avituallamiento. Quien monopoliza el agua y decide quien bebe y quien no, afronta la carrera con gran ventaja sobre las demás. Esto no se entrena, se nace con ello. Así que cuando hablamos de la selección, de la cesta, hablamos también del saber estar en ella.
Aquellas tranquilas pero dominantes, aquellas que no se desgastan pero SI beben en las cestas, aquellas que tienen carácter son las candidatas a tener éxito.
La que se acobarda con el halcón, la que no bebe y sobre todo, no dejan beber tiene a buen seguro un infeliz final. Todo influye en el resultado final.
Un animal que se dispone a afrontar una carrera deshidratado no tiene ninguna posibilidad de éxito.
Las adultas, que no son sino las mejores palomas del año anterior, tienen también ese punto de experiencia que les otorga ventaja en el primer tercio de la temporada por cosas como esta.
Pabs.