En mi cabeza, comienzan a nacer brotes verdes, nuevas parejas, flamantes cruces garabateados sobre un papel, sueños renovados etc. Deshojas un nuevo pétalo de la margarita, y el puzzle es cada vez más claro. Nuevas ilusiones, pichones a estrenar, y vuelta a comenzar.
De la colombófila me sorprende que todos podemos estar observando el mismo cuadro, y las sensaciones pueden llegar a ser diametralmente opuestas, negras o blancas. Me resulta incomprensible. Personalmente, que me encuentro ubicado en un extremo, hago un esfuerzo, trato de hallar toda la empatía que hay en mi cuerpo, para ponerme en la piel de los demás, pero me resulta agotador enfrentarme a gente que sólo ve molinos de "viento". No, no me ciego en mis ideas, pero soy incapaz de ver en las de los demás. Seguiremos intentándolo.
El viento se ha convertido en el gran enemigo de la colombofília. Siempre hubo viento, y seguramente, de otra forma, siempre se le buscó. No somos tontos. El viento a favor ayuda. Indudablemente en exceso, tiene sus peligros, pero incluso en ese caso, generalmente las sueltas acaban siendo rapidísimas, y con mejores porcentajes que de otro modo, y su resultado, forma parte de una mentira compartida, gestada por aquellos que se sienten incapaces de lograrlo sin ese divino empujón.
En lo personal, creo que una ligera ayuda, en la prueba reina no está demás. Los hay que creen que yo lo que deseo es viento en contra en todo el recorrido y tormentas a su paso. No por dios.
Hemos llegado a un punto en el que la tecnología ha puesto en nuestras manos el poder de ver más allá de hoy. Y en malas manos esto ha llegado a convertirse en nocivo.
El miércoles pasado se pudo soltar como a mi me gusta, y eso me ha compensado todo el año. Sin viento en la salida en la primera mitad del recorrido, y con una ligera brisa a la llegada. Quizá hubiera eliminado en mi trayecto ideal el calor, que apareció esos dos días por arte de magia. Esa variable fue la puntilla.
881 km en esas condiciones fueron un durísimo test, apto sólo para extraordinarias palomas. Sin engaños.
Si tenemos en cuenta, además de los kilómetros acumulados, que las palomas, a pesar de volar todo el día, no podían alcanzar la isla el día en el que se las liberó, pues algo más de 12 horas de vuelo no dan para que eso pueda suceder, era relativamente fácil imaginar que alguna de ellas acabaría por sucumbir, entrando en algún palomar, superada por las circunstancias, la sed y la oscuridad. Si además de ello, las mías no iban acompañadas por otras, dirigiéndose al mismo lugar. En definitiva, todo este jodido collage, da buena medida de lo que sucedió.
En lo personal, he logrado exactamente el mismo porcentaje que el año pasado, 20%. La diferencia es que la suelta del 2017 fue un regalo, llegándose a marcar 6 palomas en el día de la suelta. Si añado que las mías andaban con el lastre de un virus, que sin duda, afecto, de algún modo, al resultado final...todo cobra más sentido.
Este Marbella ha sido parecido al del 2016, donde se marcaron 10 palomas, 5 de un servidor, y todas a partir del segundo día. O parecido al del 2015 o incluso al primero que se hizo en el 2014, donde Sebastián metió la primera paloma de Marbella en la isla.
El viento fue una constante todo el día en gran parte del recorrido
del Marbella de los menorquines. Video tomado el mismo Sábado.
del Marbella de los menorquines. Video tomado el mismo Sábado.
El Sábado tuvo lugar el "otro" Marbella, el de los menorquines, soltando, como podéis observar en el video, con un viento a favor terrible. El responsable de todo esto, ya le conocéis. La palabra es obsesión. ¿Su resultado? Exactamente el mismo que el año pasado, 20% mismas condiciones. Marcándose 6 palomas en el día. A 1400/1500 mm, aunque lo de este año y el fortísimo viento de cola, es de auténtica traca.
Los que vivieron estas dos sueltas, pueden percibir las enormes diferencias entre ellas. El porcentaje es el mismo, lo cual demuestra que con calidad y bien preparadas se pueden obtener porcentajes similares sin la ayuda de un viento constante de 50 km/h. Ese es mi razonamiento, y no otro.
Dos terceras partes de lo que llego en esas condiciones, en mi opinión no sirve.Cuando esto sucede, el dopaje del viento emerge con gran fuerza. Sí, se deben tener en cuanta para las estadísticas y para que Pedro saque pecho, un poco más. Un Marbella auténtico ronda el 10% y no es posible, salvo milagro, marcar en el día. Es un hecho. Si además tienes en cuenta que las mías deben estar en ese %. El cuento habría tenido otro final.
Aquí quiero hacer un inciso. Pasadas unas semanas, la paloma que ha volado, Lisboa, Casablanca, Marbella, Lloret y lo que sea, y ya no nos acordamos de nada, en qué condiciones lo hicieron, cómo lo hicieron, etc.... De acuerdo, pero tened en cuenta dos cosas, esto es un gran fondo, y los entusiastas del mismo valoran esa única prueba que se da en el año. Si lo que quieren es desarrollar esas velocidades, de palomas volando a 90 km/h todo el recorrido, que lo hagan en la disciplina de velocidad, que para ello fue bautizada así, pero no más mentiras por favor.
Por lo general, tras este tipo de argucias, jajaja, hay algo escondido. No quiero ser muy explícito. Guerra de egos, ser incapaz de lograrlo sin la ayuda del viento, contentar a las masas, y un largo etc. En la isla hay un socio que siempre se ha quejado amargamente del viento a favor, y no soy yo, pero que curiosamente se ha reconvertido, y por fin ayer marcó su primera paloma de Marbella. Estoy convencido de que su reconversión cobra hoy más fuerza si cabe. Lo de siempre, hipocresía y más hipocresía...
Cuando hablo de buscar el día, no me refiero a escoger el que más viento ofrezca de los tres, entre el Viernes , Sábado o Domingo, me refiero a esperar si hace falta 10 días hasta encontrar esa "perla". Por eso y otras razones, que ya conocéis, no vuelo en Menorca.
Para acabar con este tema, recuerdo no se si fue en una entrevista, o alguien me lo comentó en su día. Sabéis que en Bélgica premian las palomas que entran en el 20%. Es otro concepto. En una ocasión un extranjero quería comprar una paloma y el dueño, honesto, le dijo que no.¿Por qué?- preguntó extrañado. Si tiene varios primero premios insistió. El propietario asintió con la cabeza, pero le hizo ver la velocidad a la que había llegado aquella paloma en aquellas pruebas. No recuerdo exactamente la historia, pero era algo así.
En su día, aquello me llamo la atención, pero no acabé de entenderlo. Hoy lo tengo clarísimo.
Por último y no menos importante. Las palomas que regresan de un gran fondo empujadas por el viento, no tienen la culpa de nada. Queda libres de todo pecado. Y nadie dice que no les resultara difícil volar en esas circunstancias, sólo digo que en esas condiciones, vienen muchísimas más palomas que en otras circunstancias en las que la mayoría serían, ciertamente, incapaces de hacerlo (ahí reside el engaño). Y esa es mi opinión , desde mi experiencia la gran mayoría no habría volado ni de coña esos casi 900 km.
Mi reflexión para los amantes del gran fondo y de este tipo de palomas, es que es un gran putada que se enmascare la realidad de este modo. El gran fondo es para fondistas no para velocistas reconvertidos y ayudados. Esa es mi visión final.
Y del mismo modo que digo esto, añado que el gran fondo marítimo es diferente al terrícola. Cada uno con sus circunstancias. Es un hecho que en mar regresan muchas menos palomas pero nosotros no podemos/debemos igualar ese hecho que las hace diferentes, con ayudas tan descaradas.
Para acabar, porque esto no tiene más mecha, y yo tampoco estoy por la labor, me gustaría acabar con varios apuntes relacionados con mis pájaros.
El año pasado vendí algunas palomas a final de temporada. Recuerdo a Brujita que acabó en manos de Carlos Verger. Me escribe el otro día que desde Baza 550km había metido dos hijas suyas la semana pasada en el tres islas regional, y ello en el primer año de cría. Y aquí no acaba todo. Varios días más tarde, coincidiendo con la suelta de Marbella, la primera paloma que mete en su palomar, su primera Marbella, es hija de una hembra que le regaló Biel Antich, cuyos padres nacieron en casa. El macho el 64, vendido en Canarias, un directo de la Valdepeñas, la madre, la 95 madre de Anastasia, que está en casa.
Por cierto Carlos, está completando una temporada increíble en su club, donde va primero en el absoluto. Mi enhorabuena desde estas líneas.
El 64 |
En mi club de Binissalem, Llorenc Armengual, otro que esta cuajando una temporada brutal, una de las Marbellas que mete es hija de una hembra 100% de mi línea, que le regalo Guiem Terrasa en esas visitas que todos realizamos de vez en cuando.
Por otra parte, en la conversación que mantuve con Tono Perelló, me comento que en este Marbella, una de las que mete, la madre es de mi cultivo.
Por cierto "AQUILES", el macho que regresó ayer de Marbella es hermano del azul de la foto de más arriba. Ese azul, voló un 1º social de Villajoyosa, 7º del Grupo Mallorca y 2º Social de Marbella 2017 en el Club La Rápida. Vendí al padre en Canarias, conservo a su madre. El padre el 06, es hijo del 77 con Princesa, 2º Insular Hellin e hija de la Valdepeñas. La madre es una hembra de Nando de la Fuente que me regalo en su día y que conservo.
EL 06. |
El día que lo mande todo al carajo....ese día podré sentirme orgulloso de la huella que dejé y de haber construido algo en colombofília. Eso me hace feliz.
PabS.
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