lunes, 16 de octubre de 2017

Méjico lindo y querido.

  En ese remar y remar en el que se han convertido mis viajes por la red durante las últimas semanas, voy troceando todo aquello que me resulta interesante, cualquier fotograma que capte mi atención.
  Hoy volamos a Méjico. Este increíble país tiene una extraordinaria colombofilia, con numerosos practicantes, todos ellos muy apasionados. Vuelos con más de 30.000 palomas y más. Todo un sueño, y absolutamente nada que envidiar a otras partes del globo terráqueo.
Los protagonistas de hoy, Palomar Trébol son especialistas de medio fondo, y demuestran lo bonito que puede llegar a ser la colombofília en equipo. Nos hablan de su historia y de la forma en la que ellos sienten esto de las palomas. Dejan en el tintero interesantes reflexiones con las que concuerdo, al menos en su mayoría.
  Sus primeros pasos, como lo hacen, el respeto por la paloma "europea" pero su predilección por lo que ya tienen allí, su pasión por las palomas, pero no por las "razas" ni "nombres", la admiración y consideración que profesan a los grandes aunque ahora lo sean menos,  la emoción de ganar una carrera de más de 30.000 palomas, su búsqueda por lo que gana hoy y no por lo que ganaba ayer, nos venden la moto con los machos, pero al final como casi siempre la buena es la hembra, etc...
  La colombofilia es universal, no necesito que sean rubios, altos y del norte de Europa para visualizar cuando hay pasión y conocimiento.
 Empatizo con algunas de sus afirmaciones, como cuando nos hablan de la paloma importada de Europa, y no puedo más que darles la razón. No porque ésta sea inferior o superior, sino por el hecho constatado de que bueno hay poco en cualquier lugar, y comprar pichones europeos (aunque sean de lo mejor) están en inferioridad con los que ya funciona allí desde hace lustros, algo que nosotros en las islas sabemos muy bien, y yo no me cansaré de repetir.
 No esperéis que los protagonistas del video de hoy os revelen el secreto de la eterna juventud. No seguramente no, pero uno al visionario, ve y escucha a gente lógica, y para mi, la ésta y la pasión colombófilas son las cualidades más importantes de un campeón.



PabS.

sábado, 14 de octubre de 2017

En lugar de preguntarte por qué te suceden siempre las mismas cosas, pregúntate porqué eliges siempre los mismos caminos.




  Tras un breve paréntesis de diez días volvemos al lío. ¿El título del post?. Simplemente lo clava. Funcionamos así. La puerta que conduce al éxito colombófilo esta ahí, tan sólo hay que abrirla, pero  sorprendentemente muchos prefieren mover la manivela del mismo portón una y otra vez...
Esto podría ser aplicable a mil situaciones. Estamos programados para actuar según la ruta prevista y somos tremendamente perezosos como para salirnos del guión. ¡Error!.

He aprovechado estos días para reflexionar más que de costumbre. Últimamente han tenido lugar ciertos acontecimientos  merecedores de al menos una respuesta por mi parte, y tengo la pluma cargada, pero, desaparecieron, por el momento, las ganas de usarla. Si me animo, esta vez seré muy contundente, con ojos y cara que identificar. 

En ese reflexionar he llegado a la conclusión que me he equivocado de público. Ves lo que el colombófilo hace a sus palomas, y se te cae el mundo encima. ¿Será posible que seamos tan necios, tan ignorantes?, ¿de veras somos así?, ¿se trata quizá de un postureo?. Observas atónito como los que dirigen son generalmente los que menos saben de esto, y te cuestionas ¿pero como diantres llegaron a acomodar sus nalgas en ese sillón?. Mucho de que hablar.

  Leía el otro día una entrevista al neurocientífico argentino MARIANO SIGMAN, hablándonos de uno de los hallazgos de la neurociencia, concretamente nuestra inclinación  a rechazar o a juzgar de forma negativa a los que consideramos diferentes.
   Decía lo siguiente: "La evidencia nos muestra que juzgamos distinto a quienes consideramos diferentes desde el día en que nacemos. Un chico reacciona de manera muy distinta a un acento que le es conocido que a uno que le es extraño o a rasgos faciales familiares o distintos. Pero también un juez. Sabemos que dictan sentencias distintas según la cara del acusado o de la víctima. Una persona es mala si hace cosas malas, no por tener cara de mala, sin embargo, todos vemos una película y sabemos quién es el malo por la cara. Todos tenemos prejuicios sobre cómo creemos que es la bondad".
 La colombófila no es una excepción. Doy fe de ello. La gente se mueve por prejuicios y patrones preestablecidos. Hablan de faltas de respeto sin conocer su significado. Juzgan y critican precisamente lo que ellos son. Tanta incongruencia me desvela.
No seré yo el que abra la misma puerta de cada año. Llevo preparándome desde hace tiempo para ejercer otro tipo de colombófila. Si ello exige ciertos sacrificios, estoy dispuesto a asumirlos, pero tengo muy claro que voy a practicar mi colombófila, no la de los demás. Si ello implica dejar de volar algún año o volar sólo 30 palomas otro, lo haré sin contemplaciones, en la misma medida que selecciono mis pichones. 
 Los campeonatos son la salsa de esto, hasta ahí de acuerdo, pero también nuestro CANCER. No, ya no me seducen, están politizados, muchísimos intereses detrás. Son la gran farsa y son manifiestamente mejorables. 
 En lo personal procuro no moverme en función de por dónde sople el viento. Lo afirmo, con o sin viento. Este año un virus me reventó toda la temporada, una que tenía visos de excelsa, y se quedó en una para olvidar. A nivel nacional echando un ojo a la anquilosada web de la Federación, leo que he quedado en el Campeonato nacional de medio fondo, en el Campeonato nacional de seguridad, y en la Copa de su majestad el Rey. Con estos son ya 22 distinciones nacionales las que presenta mi curriculum. Resulta bonito leerlo, pero  significan poco o nada para mi. Sería un interesante debate su desarrollo.
¿Por qué? Porque me aburren. Me aburre aquello que no entiendo o que me parece incomprensible o manifiestamente injusto.
  Para no ser yo el que os aburra, os dejo con dos consejos de Bellani. Los dos muy buenos.

PabS.

viernes, 13 de octubre de 2017

"YouTubeando"

 Hoy vais a tener doble sesión de pluma negra. Uno siempre funcionó a impulsos. 
Mis palomas han estado sueltas todo el verano. "Haciendo callo". Todavía quedan los últimos bebés en las tazas, pero ahora ya comienzo progresivamente a controlar el vuelo. Esto resulta muy provechoso para los próximos meses. Si las palomas vienen de un libertinaje absoluto, el poso de vuelo que tienen bajo sus alas no tiene precio. ¿Cómo lo sé?. Lo observo desde hace una década. No hay más que limitar esa libertad para darse cuenta de lo extraordinariamente bien que vuelan cuando ese mágico 24 horas libre se transforma en dos vuelos diarios. Al revés, que es lo que muchos hacen, no funciona ni se le parece. 

Últimamente estoy algo aburrido de la lectura y estoy iniciándome en algo que jamás había hecho en el pasado, youTubear.
Varios videos captaron mi atención esta semana. Todos en general son en inglés. En ese sentido, no puedo hacer nada para ayudaros.
Probablemente ya los conoces, pero si no fuera el caso los cuelgo.

  El primero es de un campeón, al que yo no conocíapero eso es algo normal, porque soy muy poco de apellidos ilustres. Su nombre, Stefan Steenbergen.


   Un especialista de yearlings, y también con palomas adultas en distancias de unos 500/600 km. Hasta aquí, sin novedad. No obstante, si uno visiona con atención los fotogramas y los comentarios del protagonista se dará rápidamente cuenta del porqué le funcionan tan sumamente bien las palomas. ¿Las claves?. 
   Romperse la cabeza en tener un buen palomar.¿Cuando sabes que lo tienes? Cuando llegan los resultados. Sí lo sé, es una respuesta muy jodida, pero es la realidad. A partir de ese día ya no tendrás que romperte los cuernos en dudar si tu palomar es apto o no. Algo en lo que muchos ni tan siquiera reparan. Creedme un palomar bien diseñado es la base de todo lo demás. Estoy cansado de ver como la gente cuelga fotos de sus instalaciones, y en general, les falta lo fundamental. Desconozco el motivo, pero tengo muy claro sus resultados.
  Una gran inversión inicial (y posteriores) en buenos animales. Saber dónde ir a comprar y comenzar erguido. A partir de ahí, una selección brutal. Sólo los mejores pueden estar en las perchas. Y por último tener un sistema muy definido. Os recomiendo que le escuchéis. Merece la pena. Me ha gustado.

Son sólo tres claves, y por norma general, el neófito que comienza no aplica ninguna de las tres. Los pocos que sí aciertan con alguna de ellas, incluso con las tres, rápidamente se ponen al nivel de los mejores. Es una norma no escrita. 

  Para finalizar, un video de Wim Muller, filmado en una visita que le hizo un comprador, Mohammad jassem, que fue quien edito el video. Éste es diferente al anterior. Tiene otro enfoque. 
 Al protagonista ya le conozco, pero me ha resultado interesante poder mirarle a los ojos. Sólo así sabes de qué pie cojea. No sé si por las patillas (bromeo) pero siempre fue uno de las vedettes que me llamo mi atención. Realmente ha sido muy constante y casi siempre con excelentes resultados.
Hay una frase en la que me siento identificado. Todos los pichones son familia. A mi en un 95% me sucede lo mismo. Puedes señalar dos y rápidamente te los conecto. Fruto de un trabajo con las mismas semillas.



PabS.