A pesar de mis anunciadas vacaciones “weberas” estos días brotaron ciertas ideas en mi cabeza. A una de ellas traté de darle forma esta semana mediante una espontánea encuesta privada por whatssapp a una serie de amigos y conocidos.
La cuestión era la siguiente:
Si te ofrecieran “sangre” de la mejor paloma del mundo. ¿Con qué te quedarías, un hijo o un hermano?.
No facilito más información. No detallo si detrás de ella hay un lustroso linaje o es un simple cruce abierto. Tan sólo que la paloma es eso…la mejor paloma del mundo.
Las opciones ante tan imaginaria pregunta son:
a)Quedarse con un hermano o una hermana.
b) Quedarse con un hijo o una hija. Y en el supuesto de que optáramos por esta opción, no facilito conque hembra la pondríamos.
Llegado a este planteamiento teórico. La ecuación dispone de esas variables. Mi curiosidad viene dada porque en realidad tal y como lo planteo no hay una respuesta correcta, y no la hay porque hay demasiadas variables a despejar.
Aunque ante este bendito problema de elección mi posición es clara desde un primer momento: un hijo.
En mi planteamiento lo aleatorio juega un papel importante, pero a priori con esas cartas ¿Con que te quedarías tú?
Si hay algún interesado en contrastar esto conmigo puede contactar en pablomenorca@hotmail.com o en el 616032470 (whatssapp)
No domino la genética. Es un mundo apasionante pero demasiado oscuro para mi.
Lo que si "domino" es mi lógica, al menos la mía, y ésta me dice que mi filosofía es la de poner a reproducir lo que brilla en la cesta. Siempre hay excepciones pero para mi es el camino más corto. El que menos se tuerce. Todos los caminos se tuercen, pero este menos.
El hermano puede salirte igual o mejor que el campeón. Podría ser. Pero el que en mi opinión lleva lo que yo busco es el campeón. Esa es la política a seguir.
En mi casa todas las palomas que han volado gran fondo y que han tenido la oportunidad de reproducir han dado palomas de gran fondo. Tan sólo un apunte del porqué pienso como me expreso.
Es muy cierto que el hermano del campeón tiene la misma sangre y en cambio el campeón aparejado con una hembra x su descendencia se diluye. No obstante yo le doy otro enfoque. El campeón es el que lleva la sangre “real”, el gen que lo hace especial. En su descendencia habrá de todo, igual que con sus hermanos, pero desde mi óptica me inclino por el hijo.
No soy tonto, prefiero un hermano bueno que porte el gen que un hijo malo que no lo lleve consigo. O , sabiendo que los dos llevan el gen bueno ya la historia cambia, pero las cartas son las que son.
Hay demasiados factores que distorsionan los posibles resultados pero creo que al escoger una u otra opción define como pensamos y hacia donde nos dirigimos en colombofilia.
Las conclusiones de esta improvisada encuesta ofrecieron datos reveladores. De unos 30 encuestados podíamos encontrar desde campeones, colombófilos con resultados, gente sin suerte por ahora y neófitos, etc.
Llama la atención que entre la gente sin suerte por ahora y los neófitos la respuesta mayoritaria (no siempre) fue el hermano.
Y por el contrario, entre los campeones y colombófilos con resultados la respuesta fue siempre hijo. Y afinando todavía más hija.
Hubo excepciones pero mi reflexión es que los campeones optaron por hijo/hija y el resto no.
Nadie acertó porque no hay respuesta correcta, pero los % son aplastantes. Lo que si hay es un indicio de cómo pensamos, y esto último me resulta muy revelador.
Pabs.
