jueves, 3 de noviembre de 2016

Pocas buenas palomas y muy buscadas.

AS paloma social La Palmesana 2016. 
(Paloma criada en casa y volada por Lluç Llabrés).
 
Leía estos días por algún rincón de la red que nuestros amigos belgas y holandeses en un tic con tintes no exentos de cierta hipocresía se echan las manos a la cabeza cuando un extranjero adinerado paga sumas desorbitadas por un pichón por el mero y singular hecho de ser hermano del "fulano" o "mengano" de turno. Con razón les sacan las célebres "pastitas". Cabría preguntarse también quien le pone el precio. El mercado amarillo supongo.

No obstante ellos mismos en un, admitámoslo,  ejercicio de sinceridad, "hacen cuentas" de cuantas palomas realmente buenas ha dado una pareja determinada o yendo un paso más allá, una paloma en concreto. Salen muy pocas. Una o dos en el mejor de los casos en toda su vida reproductiva...¿y el resto de hermanos?. ¿Que hay de esos treinta ó cuarenta hermanos en el supuesto de que estemos hablando de una buena reproductora que haya tenido la clase y la fortuna de hacer carrera en un palomar?¿Dónde están?.
Efectivamente palomas buenas hay pocas, aunque su hermano haya sido un verdadero fuera de serie. Hay menos de las que imaginamos, y en mi opinión así debe ser, pues el viaje colombófilo consiste en buscarlas. No tendría sentido otra cosa.
Cada uno debe señalar sus propias cotas y en un noble y veraz  ejercicio de honestidad colombófila poder llegar a definir con la experiencia del tiempo que es una buena paloma.  No es tarea sencilla, muchas veces el árbol no nos deja ver el bosque. No todos poseen esa claridad.
A título particular, he tenido la gran suerte (la suerte no existe) de ser un tipo con resultados, que a día de hoy no sabe lo que es tener un bajón. Y esto en el mar habla con mayúsculas de lo que me traigo entre manos.
 Ninguna temporada se parece a la anterior. Todas ellas son diferentes. En gran parte porque los animales se renuevan anualmente, por las condiciones climatológicas, por las dificultades del mar, por no haber sido capaz de llevarlas donde merecían, y un largo etc, pero ser capaz y poseer la habilidad suficiente para sobreponerse a los baches del camino es fundamental para no alejarnos de lo único que aquí es realmente importante : La búsqueda de buenas palomas.
 Gracias a ello son muchas las palomas marcadas en los diferentes penínsulas. ¿Las convierte eso en buenas palomas? La respuesta es no, además en un no tajante, seco y deshidratado, que no admite debate al menos por mi parte.
A pesar de mis resultados, soy más exigente que aquellos que no han tenido la fortuna de disfrutar de esto como yo lo he hecho. Valoran y disfrazan a animales a los que yo hace tiempo deje de valorar. Tener una visión tan deformada (hablo de mi) tiene tintes crueles, pero Secretariats, Red Rums, Jappeloups, hay muy pocos ejemplares de esa valía. 
El objetivo debe ser reciclarse en un frenético no parar en cuanto a la preparación de nuestros pájaros y acercarse con nuestros animales lo más posible a la sombra de semejantes cracks. Sólo de este modo será más complicado que no nos hundamos con el paso del tiempo y no alcancemos jamás a responder, ni tan siquiera a adivinar en que parte del proceso nos equivocamos, o un tan sencillo ¿dónde comenzamos a desviarnos?.

En la misma línea de argumentación, y fiel a mis forma de ser de reflexionarlo todo, con cierta frecuencia me cuestiono si de algún modo yo mismo me he convertido en alguno de esos charlatanes, parlanchines o sacamuelas autorizados de las teorías más insípidas y variopintas que uno pueda imaginar. Puede que sí, pero mientras la cesta , y en ello también me ayuda,  siga confirmando mis resultados y razonamientos seguiré en la brecha. En el momento que decaiga, no osaré querer imponer verdades que no puedo demostrar. Mi inteligencia llega a algo tan simple como eso, aunque una flor no hace la primavera ni en un sentido ni en el otro. Demostrar lo que afirmas debería ser un principio  en nuestro ordenamiento moral como colombófilos. Todo lo demás se lo dejo a los seguidores de las novelas caballerescas.


Pabs.