Ayer sin ir más lejos, releyéndo algunos artículos olvidados (siempre acabamos en ese eterno bucle) recordé éstos del año 2010 de Gustavo Medina, http://gus-tavo-medina.blogspot.com.es/
Personalmente estuve en Tailandia esperando palomas de una suelta de 500km allá por el año 2006. No puedo comparar pero entiendo que en Taiwan, en China, por las razones que sean, son el motor que mueve la colombofilia de nuestra época. No imagino hoy el negocio de Belgas y Holandeses y otros sin el empuje de esta parte de Asia.
Os invito a que los leáis.
Aquí les dejo la traducción de la
primera parte de un interesante artículo sobre cómo funciona la
colombofilia en la isla de Taiwan. En muchos casos están a años luz de
nosotros, pero, en otros aspectos, su competición tiene grandes
similitudes con lo que hacemos por nuestras Islas... debe ser que el
estar rodeados de agua por todos lados nos hace perder la
razón...je,je,je,je. En los próximos días iré publicando el resto del
artículo.
Pigeon Vitality visita Taiwan!
Reportaje hecho por Dyllan Debord (dyllan.debord@pigeonvitality.com) .
Publicado originalmente en: www.pigeonvitality.com
Taiwan es uno
de los sitios más duros del mundo para viajar palomas y también es, sin
duda, la tierra de los colombófilos profesionales, que viven por y para
la colombofilia. Se toman tan en serio todo lo que tiene que ver con la
colombofilia que cualquier importación, ya sean palomas, granos,
medicinas o suplementos, es sometida a un riguroso chequeo para
verificar si es “digno” de ser usado por los colombófilos de aquel país.
Cuando algo no los convence, nunca más lo vuelven a importar.
Durante
largo tiempo hemos informado sobre muchos colombófilos, de diferentes
países. Hablando de sus excelentes resultados y de cómo nuestros
productos los han ayudado a obtenerlos.
Algunas
de las sueltas más duras del mundo se llevan a cabo en Asia y por eso
sentimos la necesidad de desplazarnos hasta allí para conocer de cerca a
los colombófilos de esa zona del planeta. Siguiendo las
recomendaciones de nuestros distribuidores en la zona y las de muchos
colombófilos locales, decidimos realizar nuestro viaje en noviembre de
2010, visitando Taiwan y China con la intención de compartir nuestra
pasión, entender cómo se practica la colombofilia en esta parte del
mundo y conocer mejor los requerimientos de un deporte que allí se ha
convertido en profesional y, por tanto, requiere de una alta perfección
en todo lo que respecta a medicamentos y demás complementos.
Empecemos con un poco de información sobre cómo es la colombofilia de Taiwan:
- Taiwan es segundo país del mundo en número de licencias colombófilas (entre 80.000 y 100.000) sólo superado por China.
- Más
del 80% de los palomares están situados dentro de la ciudad, en las
azoteas de las casas y edificios. Más de un tercio de los colombófilos
son absolutamente profesionales.
- En
Taiwan las competiciones constan de rondas eliminatorias antes de
llegar a la suelta final (Nota del traductor: Sería algo similar a los
campeonatos de otoño que se realizan en Gran Canaria cada año).
- Dentro de la Isla existen dos rutas de
vuelo (norte y sur). Los colombófilos que viven en el sur de la Isla
compiten en las sueltas de la dirección sur y los del norte lo hacen de
forma similar con las de la ruta norte. Un primer premio en cualquiera
de estas sueltas puede llegar a suponer una ganancia de unos 150.000
euros.
- Todas las carreras oscilan en
distancias de entre 500 y 600 Kms. Siempre se suelta desde altamar.
Nunca se suspende por mal tiempo. De esta forma sólo las mejores llegan a
la final.
- Sólo compiten con pichones y los mismos
sólo pueden participar en un campeonato (sueltas preparatorias y final)
a lo largo de su vida. En los siguientes campeonatos el colombófilo
debe inscribir nuevos pichones, que no hayan participado con
anterioridad en ninguna otra competición. Esto lo hacen con la idea de
generar una competición con el máximo de igualdad. Los pichones que
"sobreviven" a todo un campeonato, como no pueden volver a competir, son
vendidos, subastados o destinados a la reproducción.
Ahí va la segunda parte de la historia
de nuestros "colegas isleños" de Taiwan... Sacado de la misma fuente
que la primera... como es lógico...je,je,je,je,je
“…
La colombofilia en Taiwan comienza a practicarse en 1950, pero no se
populariza hasta los años ochenta. Hasta 1995 los taiwaneses soltaban
desde tierra, al estilo europeo. Entre 1995 y 2000 fueron aumentando
los clubes que ofrecían sueltas desde altamar, mientras que se cerraban
clubes que sólo realizaban sueltas desde tierra. Desde el 2000 hasta
nuestros días sólo se realizan sueltas de altamar en Taiwan. En estos
momentos, están criando en torno a un millón de pichones por año.
Partiendo de estos datos, ya podemos empezar a comprender cómo se
compiten y cómo es la colombofilia taiwanesa.
No
es fácil llegar desde Noruega hasta Taiwan. El viaje duró 23 horas con
paradas en Amsterdam y Bangkok. En el aeropuerto me esparaba el doctor
AJ Guo, prestigioso veterinario y representante de Pigeon Vitality en
Taiwan. De allí fuimos a comer y empezamos a planificar mis actividades
durante los días que estuviera en la Isla.
Mi
idea era visitar los palomares punteros de Taiwan, así como a los
principales vendedores de productos colombófilos del país. Por suerte
para mi, la mayoría de ellos eran amigos y clientes del Dr. Guo.
En
cualquier caso, mi primera parada sería en mi hotel, muy cerca de la
clínica del Dr. Guo, donde sólo puede dormir un par de horas, después de
una larga noche de trabajo, respondiendo correos y haciendo planes para
2011. También dediqué parte de mi tiempo esa noche a charlar con el
recepcionista del hotel, pues su padre resultó ser colombófilo. La mayor
parte de la conversación la pasamos con el padre del recepcionista al
otro lado de la línea del móvil de su hijo. Él iba traduciendo a su
padre lo que yo le contaba sobre las palomas europeas, líneas, formas de
entrenamiento, etc. Fue una conversación muy placentera que me permitió
aprender mucho sobre la forma de competir en Taiwan.
Al
día siguiente, salí muy temprano junto al Dr. Guo y a un muy buen
colombófilo local, el Sr. Jacky, hacia la ciudad de Tauyen, a unos 30
Kms al oeste de donde estábamos. Allí no esperaba un hombre apodado
‘Mr. Number 1’, uno de los mejores colombófilos del país en los últimos
años. Él nos llevó a su nuevo palomar. Durante el camino hasta Tauyen,
vi más palomas de los que nunca había visto en mi vida en lo alto de
las casas y en las azoteas de los edificios. Los palomares eran
fácilmente identificables por su estrutura y color, normalmente celeste o
gris claro. Había palomares por todos lados y encima de cualquier
construcción que pudiera ofrecerles un poco de altura para poder
instalarlos. Era totalmente imposible contarlos. Los palomares se
distinguían desde muy lejos en el horizonte. Ahora ya me quedaba claro
por qué esta pequeña isla de 160 Kms de largo es uno de los sitios de
mayor densidad de colombófilos por Km2. También me llamó mucho la atención lo bien cuidados y el perfecto estado de conservación que tenían todos los palomares.
Cuando
llegamos a Tauyen, nos dirigimos a una calle lateral para llegar al
palomar de ‘Mr. Number 1’. Su nuevo palomar estaba situado a unos once
metros de altura y dividido en cuatro plantas. En las dos superiores se
encontraban criando sus campeones de años anteriores y los viajeros del
año actual. Era un palomar superior. Limpio como he visto pocos. El
sistema de limpieza de estas dos últimas plantas era realmente
ingenioso, casi se podría decir que una obra de arte. El tema de la
limpieza es algo clave para ‘Mr. Number 1’ que siempre decía: “El
palomar debe estar tan limpio como si fuera nuevo. Ninguna partícula de
polvo o suciedad es bienvenida”. El segundo piso, contando desde el
suelo, se empleaba para almacenar las cestas, productos y otros
accesorios. Me agradó ver que, a pesar de utilizar muy pocos
medicamentos, tenía en su almacén nuestros productos Improver &
AntiFungal…”
Ahí va la tercera parte de la historia...
“… Fuimos recibidos por Mr.
Number 1 y su ayudante en el piso bajo de su palomar. En este piso había
trofeos por todas partes y fotografías de sus mejores palomas. Era una
estancia preciosa y muy cómoda, donde os invitaron a tomar té. Al
respecto de las campañas de viaje que se realizan en Taiwán nos comentó
que son cuatro. La zona norte tiene la campaña de primavera (abril), la
de verano (junio), la de otoño (septiembre) y la de invierno
(diciembre). Se llevan a cabo dos sueltas por semana. Cada colombófilo
puede elegir en que campañas quiere viajar. Mr. No. 1 y su ayudante
suelen viajar sólo en las campañas de invierno y primavera. En la zona
sur sólo hay tres campañas: primavera (marzo-abril), verano
(octubre-noviembre) e invierno (octubre-noviembre). Sólo realizan una
suelta por semana. No compiten en verano porque julio y agosto son
extremadamente calurosos en el sur de la Isla.
Nosotros
le entregamos a Mr. Number 1 un regalo consistente en: un lote de
productos “Pigeon Vitality” (Improver & AntiFungal) y el gran éxito
del 2010 en Europa y América el ‘Oxy-B’, que en breve será introducido
en el mercado taiwanés. El regalo fue perfecto para Mr. Number 1, que,
durante nuestra charla, ya nos había comentado el cambio tan positivo
que había notado en sus palomas durante el pasado año, al comenzar a
suministrarles nuestro productos.
Como
han podido comprobar, el edificio donde se asienta el palomar está
totalmente dedicado a la colombofilia, incluso hay una vivienda donde
reside el cuidador. La vivienda de Mr. Number 1 se encuentra a pocos Kms
de su palomar.
Una
vez que terminamos el te comenzamos a subir para visitar el resto del
edificio. En la tercera planta habían realizado una división para alojar
los reproductores. Una de ellas aun estaba en construcción, mientras
que la otra ya estaba plenamente operativa. El departamento que aun
estaba por finalizar era mucho mayor que el que actualmente alojaba a
los reproductores. La calidad de las palomas que pude ver aquí era
sobresaliente. Entre las rejas del suelo y el techo del segundo piso
había unas cintas deslizantes automáticas que permitían la fácil
limpieza de todas las secciones del palomar.
Mientras
visitaba esta parte del palomar y veía todas las palomas incluidas en
el cuadro reproductor, me sentí como en medio de una exposición. No sólo
por la cantidad de palomas que puede contemplar, sino también por lo
impecable que parecía todo. Cualquiera diría que el palomar estaba
siendo inaugurado ese mismo día, pero no era así. Este efecto se
consigue mediante el cuidado y la limpieza exhaustiva del mismo tantas
veces como sea posible al día. Esta forma de proceder tiene dos grandes
ventajas: se aumenta la durabilidad de la instalación y se evita que las
palomas puedan coger ninguna enfermedad. Todo ello gracias al excelente
trabajo del ayudante de Mr. Number 1 para mantener este enorme palomar
sin ni una mancha.
En
relación a las palomas en sí mismas, me llamó la atención que, a pesar
del asfixiante calor que hacía en esos días en Taiwán (28º en pleno
noviembre), estaban perfectamente hidratadas y no daba la sensación de
que para ellas fuese un problema relevante el soportar tales
temperaturas.
Los
palomares taiwaneses no suelen tener muchas palomas, porque ellos basan
todo en la calidad y tras finalizar cada competición las palomas
restantes son retiradas y comienza la búsqueda de un nuevo ganador.
Desde
lo alto del palomar de Mr. Number 1 se podían ver numerosos palomares
por todas partes, que intentaban copiar su estructura, sin conseguirlo.
Mr. Number 1 comenzó a competir con palomas a los trece años. Hoy tiene
en sus instalaciones un total de 300 palomas de primera calidad. Su
mejor temporada fue en 2004. Ese año iniciaron la competición 14000
palomas, pero sólo superaron las rondas eliminatorias 20 de ellas y la
de Mr. Number 1 fue la ganadora. Desde entonces, él siempre se ha
mantenido en los puestos de cabeza, lo que le ha hecho ser merecedor de
su sobrenombre: Mr. Number 1!
Después
de esta larga, pero placentera, visita, Mr. Number 1 nos invitó a comer
en un restaurante típico de la zona, donde pudimos degustar los platos
característicos de Taiwán y, por supuesto, su cerveza. Por más que comía
sin parar, no dejaban de llegar nuevos platos a la mesa. Tengo que
reconocer que todo estuvo muy bueno.
Muchas gracias a Mr. Number 1 por invitarnos a pasar este día tan fabuloso…”
Aunque con algo de retraso, ahí va la cuarta parte del artículo...
“12 de
noviembre de 2010. Al día siguiente nos habían invitado a visitar otro
de los palomares punteros de la Isla, el del Sr. Dale Zen, que vive
cerca de Taipei, en Chunghe. El Dr. Guo me comentó que el Sr. Zen tenía
una forma muy particular de llevar su palomar, la cual, en su opinión,
impedía el desarrollo de enfermedades en el mismo y hacía que que sus
palomas gozaran de una salud excelente. Esto despertó inmediatamente mi
curiosidad.
Desde lo alto de un edificio de apartamentos, un hombre nos saludaba.
Era el Sr. Zen. Desde allí abajo podíamos distinguir perfectamente la
forma de sus inmensas instalaciones. Tras subir cuatro pisos llegamos
hasta el palomar. Era una estructura impresionante, que ocupaba toda la
azotea del complejo de apartamentos. Esto sería algo impensable en
nuestras grandes ciudades, aunque debo decir que la gente aquí tiene un
tremendo respeto por los colombófilos y ellos intentan siempre dar buena
imagen y colaborar con el resto de la sociedad para evitar problemas
con los vecinos. Una vez arriba, no podía dejar de sentirme asombrado
por las dimensiones y la belleza del palomar del Sr. Zen. Él nos explicó
que sólo sus mejores amigos pueden pasar al interior del palomar y en,
cualquier caso, siempre deben dejar fuera sus zapatos y emplear los
“zapatos para invitados” que él les ofrece. Considera que los zapatos
“van a todas partes” y pueden ser un factor de contagio de múltiples
enfermedades. Desde la altura de su palomar se podía divisar el paisaje a
muchos Kms. de distancia, incluso se llegaba a ver el mar a lo lejos.
Mr. Zen nos explicó también que él hace análisis de los excrementos de
sus palomas a diario, para de esta forma poder anticiparse a cualquier
problema potencial.
A pesar de lo dicho, me permitieron entrar en el palomar y pude ver que
su interior tenía el mismo aspecto que el del Sr. Número 1. Era un
sitio extremadamente limpio. El Sr. Zen limpia su palomar dos veces al
día para mantener impecable la salud de sus palomas. Para poder mantener
este nivel de excelencia, se requiere dedicar mucho tiempo a la
atención del palomar, del que el Sr. Zen dispone porque es un
profesional de la colombofilia, al igual que también lo era el Sr.
Número 1. En su tiempo libre ayuda a su hermana, que posee un
restaurante en la ciudad.
Cuando las palomas del Sr. Zen son entrenadas desde cualquier punto de
la Isla, siempre llegan muy sobradas y dan muchas vueltas sobre el
palomar antes de posarse, demostrando lo fácil que ha sido para ellas.
Cuando las palomas han volado el tiempo establecido, Mr. Zen silba con
fuerza y las palomas se tiran como si fueran una sola y corren como
locas hacia los comederos, donde les ha colocado exclusivamente la
cantidad justa y necesaria de alimento para cada época del año. Él lleva
un control muy estricto sobre qué comen sus palomas. Su idea es que las
palomas deben permanecer siempre ligeras, pero fuertes. Pude observar
en sus bebederos que el agua que suministraba tenía el color
característico de nuestros productos Improver y AntiFungal. El Sr. Zen
utiliza ambos productos y está plenamente satisfecho con ellos. Nos
comentó también que en el norte de Taiwan se compite dos veces por
semana, mientras que en el sur solamente una. El Sr. Zen comenzó en este
deporte a la edad de 12 años y lleva ya 30 años de competición, con
numerosos éxitos, pero el que más grato recuerdo le produce fue en 2004.
Era una suelta organizada por la asociación del norte de la Isla y
participaban 15000 palomas. El Sr. Zen había apuntado 32 pichones, de
los cuales 28 consiguieron llegar hasta la final, lo que es un auténtico
record teniendo en cuenta lo duras que son las sueltas previas a la
final y el sistema de eliminatorias empleado aquí (si una paloma se
pierde un enceste queda fuera de la competición). Llegada la suelta
final, Mr. Zen clasificó su primera paloma en el puesto 16º y varias más
en puestos cercanos a ésta. En total, el Sr. Zen ganó en esa suelta la
nada despreciable cifra de 30.000 euros.
Tras acabar la visita, fuimos a tomar un aperitivo junto al Sr. Zen. Él
nos guió con su moto hasta el local. Era un sitio realmente pequeño
donde tuve la oportunidad de probar nuevas especialidades de la zona y
una especialmente deliciosa, los “rollos de desayuno”. Entre más comía,
más iban llegando a la mesa. La salsa picante con la que los servían
también era delicisosa.
Tuvimos también tiempo para discutir sobre el trabajo veterinario del
Dr. Guo en Taipei. Me comentó que una de sus tareas más habituales es la
de realizar chequeos a las palomas que se importan de Europa, a
petición de sus compradores. Según su experiencia, en el pasado era muy
común que muchas de esas palomas llegaran con diferentes problemas de
salud, especialmente los relacionados con temas de ovarios. Me recalcó
lo importante que es controlar la salud de todas las palomas que se
importan para garantizar que vienen sanas al 100%. Ese es uno de los
trabajos fundamentales de su clínica, que atiende a los 100 clubes que
existen en Taiwan. Son 100 clubes que, a su vez, agrupan a 100.000
colombófilos.”
No, no... que no me había olvidado... aquí les dejo la quinta y última parte del artículo sobre Taiwan que estaba traduciendo:
"...Cuando comienzan a viajar
sobre el mar, los pichones no suelen sobrepasar los seis meses de edad.
En algunos clubes llegan incluso a competir, en el primero de los
entrenos de la temporada, pichones de sólo cuatro meses. Estos últimos,
cuando acabe la campaña, no sobrepasarán los seis meses de edad. El Dr.
Guo piensa que esta es la parte más cruel de nuestro deporte.
En
cuanto a sistemas de competición, muchos palomares simplemente se
limitan a jugar con la restricción de comida para intentar motivar a las
palomas, llegando incluso a disponer de sistemas de alimentación
individual. Casi nadie emplea la viudez, al estilo que la conocemos en
Europa. Algunos admiten usar el “sistema de oscuridad” durante la muda.
Debido a las variaciones de temperatura que se producen en Taiwan, este
sistema da bastantes buenos resultados.
En
el último día de mi visita a Taiwan, el Dr. Guo y yo fuimos a ver a uno
de los más importantes vendedores de productos para palomas de toda la
Isla. El propietario del establecimiento se llama Mr. Chung. Su tienda
es un local impecable. Abarrotado hasta los topes de muchísimas
referencias comerciales, pero todas perfectamente colocadas y
clasificadas. Allí están presentes todas las grandes marcas a nivel
mundial, incluida la nuestra. Dispone también de un sistema automatizado
que permite a sus clientes confeccionar personalmente sus propias
mezclas, eligiendo los granos y la proporción de los mismos. La receta
empleada por cada cliente es totalmente confidencial y Mr. Chung las
guarda en el mayor de los secretos. Revisando los depósitos donde se
almacena cada grano, no se ve ni una mota de polvo, pero, a pesar de
ello, antes de servir cada pedido todos los granos pasan por una
máquina que los vuelve a limpiar antes de que sean empaquetados y se
preparen para el envío. Todos estos procesos están plenamente
automatizados con la última tecnología disponible en el mercado. Justo
en la entrada de la tienda de Mr. Chung hay un calendario con múltiples
horarios y fechas de recogida para diferentes sueltas de entrenamiento.
En cada caso se especifica: lugar y fecha de recogida, además de
distancia en altamar desde donde se soltarán las palomas. De esta forma
cada colombófilo puede decidir cuándo y desde dónde desea entrenar sus
palomas. Según me explicaron, salen continuamente botes desde Taiwan en
diferentes direcciones, que permiten realizar muchos y frecuentes
entrenamientos. En conclusión, la tienda de Mr. Chung no sólo es un
almacén, sino un punto de reunión de todos los colombófilos de la zona
que vienen en busca de comida, medicamentos o transporte para sus
palomas.
Después de tomar un café
frío con Mr. Chung, nos fuimos a almorzar con él. El Dr. Guo había
reservado lo mejor para el final de mi visita. Comimos en un restaurante
privado, de acceso restringido sólo para socios. La comida simplemente
se puede describir como “top class”. La sobremesa se alargó hasta unas
horas antes de tomar mi avión hasta Beijing, donde asistiría al Langfang
Show y a la suelta internacional de Huaxing. Debo decir que era justo
lo que necesitábamos para recuperarnos de unos largos días en los que no
paramos de recorrer la Isla y visitar infinidad de lugares.
Deseo
dedicar estas últimas líneas a dar un millón de gracias al Dr. AJ Guo,
por su bondad y gran corazón. Me recibió como un rey en Taiwan, me ha
hecho multitud de regalos, fue una excelente ayuda cuando se perdió mi
equipaje en el aeropuerto, actuó como guía y traductor cuando lo
necesité y nunca permitió que pagara nada de todo lo que hemos gastado
en estos días. Todos estos son rasgos de un excelente anfitrión, como ya
no se ven en la actualidad. Nunca olvidaré mis fabulosos días en Taipei
y ya estoy planificando mi visita del año que viene. También quiero dar
mi agradecimiento especial a: los colombófilos de Taiwan, por enseñarme
como es la competición colombófila en su país, los ayudantes del Dr.
Guo, Mr. Jackie, China Airlines, KLM, Sandefjord Airport, Mr. Number 1,
Mr. Number 2, Mr. Zen, Mr. Chung, los cocineros de todos los
restaurantes que visitamos, el personal del Golden Taipei Hotel, el
personal del aeropuerto de Bangkok, Improver, AntiFungal y Oxy-B por
ser tan buenos productos que hacen que la gente de todo el mundo nos
invite a visitarlos, mi esposa Lene por permitirme realizar este viaje
tan fácilmente, mi hijo Leo por ser un “corazón dulce” y Dr. AJ Guo por
su profesionalidad, bondad y por hacerme sentir bienvenido de nuevo en
Taiwan."
Pabs